martes, 10 de junio de 2014

Brasil: ¡Todos unidos por el triunfo de los trabajadores del Subte!

Por LER-QI, Brasil

En el cuarto día de la histórica huelga de los trabajadores del subte de San Pablo, que paralizó la principal capital del país y a 4 días del inicio de la Copa del Mundo, el Tribunal Regional de Trabajo (TRT) juzgó la huelga como abusiva, mostrando una vez más que está al servicio de las clases dominantes.

El poder judicial viola abiertamente el derecho democrático de huelga alegando que los trabajadores del subte deberían mantener el 100% de los servicios en funcionamiento en los horarios pico, respaldando la intransigencia del gobierno de Alckimin (PSDB) y la Justicia, que mantiene el 8,7% de aumento salarial propuesto inicialmente por el gobierno y se niega a responder sobre el resto de las reivindicaciones de los huelguistas.

Con el objetivo de quebrar la creciente disposición de lucha que se viene verificando en sectores cada vez más amplios de la clase trabajadora, después del triunfo de los barrenderos de Río de Janeiro, el Tribunal determina el descuento de los días de paro y una multa contra el sindicato. Con eso buscan imponer, a través de un castigo ejemplar a los trabajadores del subte, una derrota al conjunto de la clase trabajadora.

Pero los trabajadores del subte dieron una respuesta contundente. En una asamblea con 3 mil trabajadores aprobaron la continuidad de la huelga por amplia mayoría y el refuerzo de los piquetes. Al unísono, los trabajadores agitaron la canción de guerra que era entonada por los barrenderos de Río de Janeiro y que se extendió por el país como expresión de combatividad: “¡No hay arreglo!, ¡no hay arreglo!”. Aún así, el gobierno del Estado sigue amenazando con el despido en masa de los huelguistas como forma de presión para que vuelvan al trabajo.

Los trabajadores del subte en huelga se ubicaron como expresión avanzada de la combatividad que se viene desarrollando en la clase trabajadora, cuando varios sectores deciden enfrentarse con la supuesta “ilegalidad” al servicio de los patrones y de los gobiernos para defender sus demandas. Para eso, se apoyan en la unidad para la lucha y en la búsqueda de una alianza con la población que sufre servicios públicos carísimos y de pésima calidad mientras ríos de dinero son destinados a los estados de la Copa, para maximizar las ganancias de la FIFA y sus socios capitalistas.

A pesar del llamado “plan de contingencia” a través del cual la empresa trabaja para quebrar la huelga utilizando jefes, personal administrativo y de entrenamiento, el impacto del paro es enorme, no solo por perjuicio económico a los capitalistas locales sino principalmente por los riesgos frente a la Copa.

Al segundo día de huelga, el viernes 6/06 la represión policial al piquete de la estación Ana Rosa (una de las cabeceras de línea más importantes de la ciudad), que por varias horas impidió el funcionamiento del plan de contingencia, hizo que la huelga tuviera un nuevo protagonismo, ganando las páginas de la prensa internacional. La brutalidad del gobierno quedó demostrada con las bombas y las balas de goma, descargadas sobre los trabajadores del subte que buscaban defender su derecho de huelga y denunciar los enormes riesgos a los cuales la empresa estaba sometiendo a la población al emplear, para hacer funcionar el servicio, a personal sin debido entrenamiento.

Si luego de la huelga de los choferes, el gobierno había militarizado toda la ciudad, con decenas de policías instalados en las áreas externas de las estaciones centrales del subte, luego del piquete en Ana Rosa, la policía se instaló en el interior de las estaciones portando ostensivas ametralladoras.
Con la instalación de las Fuerzas Armadas en las calles, para garantizar “la ley y el orden” durante la Copa, y el silencio frente a la intransigencia y la amenaza del descuento de los días de paro de parte de Alckimin, el gobierno petista de Dilma se convierte en cómplice de la represión del gobierno tucano (PSDB) del Estado de San Pablo, contra los trabajadores del subte.

Actuando junto con independientes en la agrupación Metroviários pela Base (Metroviarios desde las Bases), desde la LER-QI tenemos el orgullo de estar en la primera línea para poner de pie esta fuerte huelga; de la organización desde las bases para desarrollar un nuevo activismo que fue la clave de la combatividad de los piquetes; de la preparación del sector para enfrentar a la Justicia; del llamado a la unificación de todas las luchas en curso, como la huelga de los trabajadores de a Universidad de San Pablo, en un paro nacional y de la construcción de una alianza con la población a través de la defensa de la reducción de las tarifas y la estatización del transporte bajo control de los trabajadores, defendiendo también las liberación de los molinetes en diversos momentos.

Ahora, estamos defendiendo con todas nuestras fuerzas: fortalecer la huelga y los piquetes. Con la unidad de este sector que tiene un enorme peso social y con el apoyo de trabajadores y jóvenes ¡es posible vencer!

La Central Única de Trabajadores (CUT), la Central de Trabajadores Brasileros (CTB) y Fuerza Sindical deberían concretar el apoyo que declararon en la asamblea de los trabajadores del subte el pasado viernes y convocar a un paro nacional para fortalecer esta lucha y que se unifique con los demás conflictos en el país. En la medida en que no lo hagan, demostrarán su sumisión al gobierno de Dilma y Alckimin y su complicidad con el intento de imponer una derrota a los trabajadores del subte.

Todos los sindicatos, organizaciones políticas, entidades estudiantiles y populares dirigidos por la izquierda tienen la obligación de fortalecer la más amplia solidaridad activa con la lucha de los trabajadores del subte de San Pablo, participando de las acciones del sector y realizando actos y cortes de ruta en varias regiones del país.

¡Tarjeta roja al TRT! ¡Por el derecho a huelga!

¡Fortalecer la huelga y los piquetes!
¡Todo el apoyo a los trabajadores del subte!

¡No a la represión a los huelguistas y a la militarización del subte!

¡Ningún castigo a los huelguistas y respuesta a sus reivindicaciones!

¡Todos al piquete y al acto en la estación Ana Rosa, el lunes 9/6 a las 7hs. de la mañana!

Argentina. Scioli y Cristina, a los pies de la burocracia, al servicio de Gestamp

Los obreros de Gestamp que el martes 27 subieron al puente grúa para luchar por sus derechos, mientras sus compañeros bloqueaban la fábrica con las organizaciones solidarias, delegados, internas y trabajadores y estudiantes, se mantuvieron en ese lugar hasta el sábado al mediodía, cuando lograron que el gobierno bonaerense decretara una conciliación obligatoria con los despedidos en sus puestos de trabajo.

Estuvieron 4 días y medio en la altura, respondiendo al hostigamiento permanente de los gerentes, la policía, los burócratas del SMATA, el fiscal y el juez. Pasaron hambre y sed porque la empresa no dejaba ingresar sus alimentos y bebidas hasta que por presión de los militantes de los DD.HH. se rompió ese cerco brutal. Les cortaron la luz, quisieron aislarlos, sacaron al delegado de la fábrica. Hicieron de todo pero no lograron que se bajen. Afuera, al menos una vez al día, la policía hacía movimientos para mover los camiones y esto era respondido por los compañeros que llegaron a organizar 7 piquetes que se mantuvieron firmes todos esos días.

Lo que se hizo en esos días es histórico. Una tenacidad ejemplar que despertó la solidaridad de miles y miles de trabajadores y estudiantes. Las muestras de apoyo en fábricas, colegios y facultades fue creciendo y esta lucha se convirtió en una causa popular. Se mostró en la cálida solidaridad de los vecinos, que alentaban, traían café y facturas al acampe. De ahí el respeto conquistado por los compañeros es realmente merecido, de la misma forma que suscitó el odio de patrones, burócratas y funcionarios.

La fuerza de los compañeros hizo que se parase VW, Ford y Peugeot, y faltaban pocos días para que suceda lo mismo en General Motors. La mitad de la industria automotriz paralizada por la lucha de esos obreros y el apoyo de los compañeros que hacían el aguante afuera. Entonces el conflicto se convierte en un problema de Estado y pasa a las primeras planas de los diarios. Una lucha obrera otra vez en el centro de la vida política nacional, que se sostiene por su valentía y por la relación de fuerzas más general que la clase trabajadora conquistó.

El gobierno toma cartas en el asunto. Capitanich dice en su conferencia de prensa que Scioli tiene que resolver el conflicto y se llama a una reunión en Casa de Gobierno donde concurren –además de Scioli y Capitanich –Berni y Granados, Débora Giorgi, la empresa y el titular del SMATA. La reunión es un cónclave de la reacción contra los trabajadores. Los encargados de la mal llamada seguridad, represores confesos, están en la cita para discutir sobre una lucha obrera. Quieren que las huelgas vuelvan a la sección “policiales” de los diarios. Gran parte del poder de un país conjurado para derrotar a los obreros de Gestamp. Un homenaje a la fuerza que pueden lograr los trabajadores. La reunión es hermética y no se sabe qué se discute.

La jornada del sábado

El sábado por la mañana la presidenta le dedica unos minutos al conflicto de Gestamp y para no perder la costumbre hace un discurso antiobrero acusando a los luchadores de Gestamp y a la izquierda. La trascendencia del conflicto, atacado desde lo más alto del poder, pega un salto.

Ese día logró un enorme paso adelante cuando se dictó la conciliación obligatoria con todos adentro. El Ministro Cuartango llega en helicóptero con una resolución favorable a los obreros. Apoyado por el Jefe de la Policía Bonaerense Matzkin, que fue en persona a la planta a las 4 de la mañana junto con el Juez, y les dijo que si no acataban iban a comenzar con las tareas de desalojo. Allí en asamblea decidieron acatarla y bajar. Afuera se festejó este paso adelante, sabiendo que la lucha por hacer cumplir con la conciliación iba a ser difícil. Por eso se convocó a una gran movilización para el lunes a las 5 de la mañana. El acto fue emotivo, hablaron los compañeros que habían pasado los últimos 4 días en el puente grúa, recibieron a sus compañeros y sus familias, a los amigos y a todos los compañeros que estaban apoyándolos. Su valentía fue reivindicada por todos, y no es para menos. Los militantes del PTS que estuvieron en los piquetes todos estos días sosteniéndolos, no solo de la Regional Norte sino también delegaciones de Oeste, de Sur, Capital, de La Plata y de la UBA que llegó en la semana con un micro lleno de estudiantes a dar su apoyo a los compañeros, estábamos allí. El Encuentro Sindical Combativo de Norte había votado el apoyo absoluto a los compañeros de Gestamp y lo mismo hicieron los compañeros del Encuentro en Capital. Para nuestro partido esos días fueron parte de la pelea por hacer de esta lucha un gran combate.

La reacción del gobierno y la burocracia

Cuando el acto terminaba, la Ministra Débora Giorgi abría su boca gorila para tirarse contra la conciliación del gobierno provincial al que también ataca. Comenzaba la presión, y una campaña de engaños en los medios para voltearla. Era la reacción del gobierno nacional y de la burocracia contra el logro de los obreros.

El lunes por la mañana una importante marcha llegó hasta la puerta. Más de 400 militantes del PTS y de las Comisiones Internas combativas de la zona se movilizaron hasta la puerta de acceso. Allí, ante todos los medios, la empresa informa que no iban a dejar pasar a los despedidos. La excusa, que había que poner todas las máquinas a punto. Ante los canales de TV y las radios más importantes, los obreros denunciaron esta maniobra dilatoria para incumplir con la resolución que los obligaba a reinstalar a los trabajadores. A las 8 se hace una audiencia donde la empresa envía un “gestor” para desconocerla y el SMATA directamente no va. En ese momento pega un salto la campaña brutal encabezada ahora por Capitanich, que asegura que la conciliación no es correcta. Luego, el inimputable Aníbal Fernández sale con los tapones de punta, y para finalizar el SMATA con Pignanelli a la cabeza llega al extremo de decir que ellos van a garantizar que la conciliación no se cumpla y no ingresen los despedidos. Pignanelli se pregunta “¿que hace una nieta de desaparecidos en la puerta de Gestamp?”. Alejandrina Barry y Victoria Moyano le responden “es nuestro deber estar allí” y recuerdan que sus padres fueron asesinados luego de que gente como esos burócratas hiciera campañas fascistizantes contra los obreros en lucha. Le responde a este burócrata que ataca brutalmente a la izquierda el diputado de PO y el FIT el compañero Néstor Pitrola que es atacado por Pignanelli. Nicolás del Caño y Christian Castillo le contestan al Jefe de Gabinete que llega al colmo de afirmar que la posición del gobierno en el conflicto ya había sido dada por la empresa y el sindicato, en un caso de cipayismo extremo. Roberto Amador, trabajador despedido que subió al puente grúa y militante del PTS, le contesta a Pignanelli acusándolo de “mentiroso serial”. Este burócrata oficialista había dicho que los compañeros despedidos habían agredido a los demás trabajadores, y que una asamblea mayoritaria había votado aceptar las suspensiones, cuando la realidad es que una asamblea las había rechazado, y la violencia fue ejercida contra los despedidos precisamente por la patota del SMATA en la puerta de VW semanas atrás.

Fraude antiobrero

La patota SMATA se alistaba para ir a Gestamp a la mañana del martes temprano y Pignanelli twiteaba que ellos iban a impedir que ingresaran, en un claro mensaje mafioso. Los trabajadores en asamblea resolvieron concurrir con una delegación de compañeras nuevamente. A la mañana la patota no fue a la cita y luego se sabrá porqué. La empresa hizo una nueva chicana dilatoria al decir que ahora faltaba hacer una revisación médica. Pocas horas después se conoce que el Ministerio de Trabajo provincial había revocado su propia Conciliación a dos días de haberla dispuesto. La presión de la patota y el gobierno nacional surtió efecto, y Scioli, que había dado una conciliación favorable por temor a una represión que terminara con su carrera presidencial, dio vuelta su propio fallo. Un caso único, un mamarracho jurídico y un ataque a los derechos de los obreros. Los diputados Castillo y Del Caño denuncian esta maniobra declarando que “frente a la presión de la patota del SMATA al servicio de la patronal, Scioli rompe con la legalidad al revocar su propia conciliación obligatoria”. El abogado de los trabajadores Agustín Comas dice que “la revocación de la conciliación es nula y sus fundamentos son ilegales, absurdos y contradictorios”. Una burla burda. El Ministerio de Scioli dice que la conciliación no corre más porque cambió la situación de cuando fue dictada. Pero es el acatamiento de la conciliación lo que cambia la situación, como sucede ante a cada conciliación. Un fraude que pasará a la historia por lo obsceno que fue, mostrando el carácter antiobrero de todos los gobiernos que intervienen y su sumisión a una patota que había amenazado con salir en defensa de una multinacional utilizando la violencia, como hizo la Unión Ferroviaria cuando asesinaron a Mariano Ferreyra. El miércoles la burocracia del SMATA dijo que iba a convocar a un congreso de los sindicatos de la industria para discutir como frenar el avance de la “infiltración de la izquierda” en las fábricas. Dan cuenta del desarrollo de los sectores antiburocráticos que se expresaron centralmente en el Encuentro Sindical Combativo de Atlanta y en sus encuentros regionales.

Les preocupa el creciente peso político de la izquierda que se expresa en los 1.200.000 votos de los cuales no pocos son de trabajadores que ya no votan al peronismo y tambien se expresa cada vez que se venden periódicos masivamente en la puerta de las automotrices y autopartistas que sufren ataques con suspensiones por parte de las patronales en complicidad con la burocracia. Todo esto les inquieta y les genera sobre todo una fuerte paranoia que tienen como toda burocracia odiada por la base de las fábricas, que perdió todo contacto con la realidad y le apunta a cualquiera que se les oponga.
Con ese temor fueron a VW a hacer “asambleas” (ver recuadro) donde el impresentable Manrique fue a pasar papelones cuando se preguntaba si esa fábrica debía ser dirigida por el SMATA o por “gente de afuera”, metiendo cámaras y delegados para obligar a los obreros a votar.

Como no podía ser de otra manera y sin cuidar las formas, el miércoles la empresa agradeció públicamente a los gobiernos de Cristina y Scioli, al SMATA y a las fuerzas de seguridad. Un verdadero desnudo del gobierno “nacional, popular y de los derechos humanos”, ahora al servicio de un monopolio extranjero apoyado por una mafia de un sindicato que colaboró con la desaparición de trabajadores. Por ello resonó tanto que en el Congreso nuestro compañero Nicolás del Caño le dijera al Jefe de Gabinete “Usted y la ministra (Débora) Giorgi actuaron como voceros y agentes de una multinacional como Gestamp, ¡y después dicen que se enfrentan a las corporaciones!”.

Los compañeros de Gestamp sintieron este golpe pero se mantuvieron en pie de lucha. Este miércoles convocaron a una reunión muy importante en el Hotel Bauen para discutir nuevas acciones (ver nota). La lucha de los compañeros va a continuar. Nosotros reafirmamos el apoyo incondicional de nuestro partido con la lucha de los obreros de Gestamp.